Según ha informado este jueves la Conselleria de Salud y Consumo en un comunicado, el objetivo es "garantizar la seguridad de la población y una asistencia de calidad a los pacientes con enfermedades respiratorias y que también necesitan atención por otras cuestiones de salud".

De esta forma, a partir de este próximo lunes, la asistencia en los centros de salud se reorganizará para una mayor preparación "en caso de pasar a una fase más avanzada de la pandemia de COVID-19".

La Conselleria de Salud ha señalado que, "como medida preventiva", los centros de salud dispondrán de consultas específicas para atender a enfermedades respiratorias, entre las cuales se puede encontrar el coronavirus, que estarán separadas físicamente de las generales. Asimismo, han asegurado que se trata de una iniciativa "sin precedentes" para garantizar "una atención sanitaria de calidad a todos los usuarios" y para que "los profesionales sanitarios puedan trabajar en condiciones de máxima seguridad".

Además, para facilitar a los pacientes el acceso al sistema, los centros de salud implementarán un sistema de triaje telefónico a cargo de profesionales sanitarios. Este distribuirá la atención sanitaria -siguiendo criterios clínicos- en visitas telefónicas, burocráticas o presenciales.