La UPV sigue seduciendo al estudiante. La proporción de alumnos que eligen esta Universidad para cursar sus estudios superiores sigue en aumento. Este curso, unas 43.000 personas están matriculadas en la UPV, según los datos provisionales dados a conocer por el rector Juan Ignacio Pérez.

Esta cifra supone un descenso del 3% en las matriculaciones respecto al curso pasado, cuando ascendieron a 44.300.

Sin embargo, en términos relativos, se puede decir que las matriculaciones se han elevado, ya que la natalidad entre los alumnos de primero de carrera cayó aún más. En 1990, cuando nació esta promoción, la natalidad bajó un 3,9% respecto al año anterior.

La Universidad se convierte así en un reflejo de la evolución demográfica. Hace sólo diez años, en 1998, la UPV tenía un total de 61.875 alumnos.

Ahora hay menos personas en los campus, y eso trae ventajas. Para empezar, las aulas están menos masificadas. La UPV ha alcanzado un ratio de un profesor por cada 12,74 alumnos. Esto permite dejar atrás las estampas de aulas infestadas de estudiantes donde apenas se escuchaba al profesor.

Además, las notas de corte están bajando poco a poco. Por ejemplo , Arquitectura ha pasado de exigir un 7,6 el curso pasado al 7 en este ejercicio.

Pero la Universidad no sólo bebe del crecimiento vegetativo vasco. Está inmersa en una campaña para atraer estudiantes de todo el mundo. Así, los alumnos europeos que vienen a estudiar a la UPV a través de la beca Erasmus han pasado de ser 190 en el curso 97/98 a los 427 en el 06/07.

El intercambio de estudiantes está incrementándose. En los últimos cuatro años, la movilidad de alumnos que van o vienen de universidades extranjeras ha subido el 18%.

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