Al menos 20 personas han muerto y 31 han resultado heridas, algunas de gravedad, durante un tiroteo este sábado en un centro comercial de la ciudad de Nakhon Ratchasima, en el este de Tailandia, ha informado la Policía.

El autor de los disparos ha sido identificado como el sargento Jakkrapanth Thomma quien, según las primeras investigaciones, robó un todoterreno acorazado modelo Humvee de la base donde estaba desplegado, y con el que hizo acto de presencia en centro comercial Terminal 21. Primero, abrió fuego con un rifle de asalto contra un superior (un comandante), a una civil y a otro soldado, 

El oficial asesinado ha sido identificado como el coronel Anantharot Krasae, con quien el sargento protagonizó una disputa previa. La civil fallecida parece ser un mujer de 63 años, familiar del coronel, posiblemente su suegra.

Posteriormente huyó a un templo budista donde mató o hirió a varios creyentes y después se desplazó hasta el centro comercial, donde abrió fuego indiscriminadamente en el aparcamiento y después se atrincheró dentro de la zona comercial de Nakhon Rachtasima.

Una vez llegado al centro comercial, "el individuo usó una ametralladora y disparó a víctimas inocentes. Hay muchos muertos y heridos", ha explicado el portavoz policial Krissana Pattanacharoen.

Las cámaras de seguridad captaron al individuo saliendo de su vehículo en torno a las 18.00 (las 10.00 en España), y comenzó a abrir fuego inmediatamente contra la gente y contra una bombona de gas, lo que desencadenó una fuerte explosión y un incendio.

Si bien en un primer momento se creía que el sargento se había dado a la fuga, según fuentes del Bangkok Post, se recluyó en el centro comercial con 16 rehenes mientras las fuerzas de seguridad ultimaban su asalto, mientras publicaba en su perfil de Facebook fotografías y comentarios sobre el asalto. "Siendo ricos aprovechándose de los demás, ¿creen que pueden usar el dinero en el infierno?" "¿Debería rendirme?".

Los medios de comunicación tailandeses informaron en directo de todas las novedades que iban sucediendo desde los alrededores del centro comercial. 

Facebook

El pasado 26 de enero ya empezó a escribir en sus redes sociales mensajes relacionados con el tiroteo que ha llevado a cabo este sábado.

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Tras horas de tensión, efectivos de las fuerzas de seguridad pudieron acercarse al lugar donde estaba el sospechoso y le instaron a entregarse, pero éste respondió con gritos y disparos. La operación sin embargo permitió evacuar a cientos de personas que estaban atrapadas en el centro comercial.

Las autoridades establecieron un perímetro de seguridad de dos kilómetros alrededor del centro comercial para tratar de capturar al asaltante.

La Policía también ha llevado hasta el lugar a la madre del asaltante con el objetivo de lograr que se entregue a las autoridades.

La policía evitó pronunciarse sobre el posible motivo del crimen, aunque el supuesto asaltante ha publicado varios mensajes políticos y de venganza contra el cuerpo castrense en las redes sociales.

"Ahora estoy cansado", dijo Jakkakrapanth a la cámara, con casco y uniforme militar, "ya no puedo mover mi dedo".

La portavoz de la policía, Krissana Pattanacharoen, pidió al público que se aleje de las áreas de concentración, permaneciera en el interior y obedeciera las instrucciones de los oficiales de seguridad.

Horas después de los hechos, el comisario general de la Policía Real de Tailandia, Chakthip Chajinda, aseguró a los medios que la situación estaba "bajo control".

Posteriormente, se produjo un tiroteo en el que Jakkranpanth mató a uno de los efectivos de los cuerpos especiales, hirió a otro. Según la cadena de televisión Thairath TV, el sospechoso ha conseguido escapar del edificio en el que estaba atrincherado.