El coche fúnebre con los restos del militar, procedente de Santoña (Cantabria), llegó sobre las 19.32 a la puerta principal del centro de enseñanza militar, ubicado en el antiguo convento de San Francisco.

Cerca de un millar de personas ovacionaron al brigada asesinado mientras varios compañeros suyos sacaban el féretro del vehículo mortuorio, lo recubrían con la bandera de España y lo izaban a hombros hasta la puerta principal, donde se rezó un responso antes de acceder al recinto militar.

Entre las autoridades que recibieron el cadáver se encontraban el general director de la Academia, Ricardo Sotomayor; el delegado del Gobierno en Castilla y León, Miguel Alejo, y el alcalde de Segovia, Pedro Arahuete, así como representantes de las Fuerzas de Seguridad del Estado y de diversos estamentos militares.

Después del responso, el féretro fue introducido en las dependencias de la Academia, donde se han vuelto a repetir momentos de emoción entre el público. La capilla ardiente se ha instalado y abierto en el salón de actos, ubicado en la primera planta de la Academia de Artillería.

En la academia segoviana, donde prestaba sus servicios el fallecido y estudia su hijo, Iván, miembro de la escala básica de suboficiales, también se celebrará un funeral este martes a las 10,30 horas, al que han anunciado ya su asistencia diversas autoridades, entre ellos el residente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.

Respaldo de las autoridades

A la capilla ardiente también asistieron la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega; el presidente del PP, Mariano Rajoy, y el presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, entre otros

El Ayuntamiento de Segovia, sumándose al llamamiento de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), ha convocado una concentración silenciosa de cinco minutos para el martes a las doce, frente a la Casa Consistorial.