La edil ha señalado en un comunicado que esta situación proviene de una denuncia sindical al anterior equipo de gobierno, que deriva en una sentencia judicial que el Ayuntamiento tenía hasta el mes de diciembre para ejecutar.

"Se trata de un pago de apenas 33.500 euros en total para 77 monitores. La dificultad no es la económica, sino la laboral y administrativa que nos hemos encontrado para poder pagarles, porque tenían una situación que vulnera el Estatuto de los Trabajadores", ha dicho Funes.

En este sentido, ha señalado que cuando en septiembre se incorpora la Gerencia se ponen manos a la obra para calcular el cómputo de horas por trabajador "y cual es nuestra sorpresa que nos encontramos con que no había un sistema regulado de llamamiento de los monitores para trabajar, algo que es muy grave y que tuvimos que poner en marcha no solo para cumplir con la legalidad sino también para poder calcularles la deuda por todas esas personas".

Dicho esto, la edil ha apuntado que había un margen hasta el 21 de diciembre para tramitar el pago de las vacaciones una vez cerrado este cómputo. A primeros de diciembre se culminó el expediente y se remitió al Ayuntamiento por correo electrónico y además se registró físicamente.

"Con la Navidad de por medio apenas ha habido 15 días hábiles para dejar margen a tramitar este pago. Si además tenemos en cuenta que este sindicato junto a otros está perfectamente informado de estos plazos y este trabajo, no se entienden las prisas a no ser que sean políticas", dice la edil.

Así las cosas, ha indicado que quien desatascó este asunto "enquistado" ha sido el actual equipo de gobierno (PSOE-Cs) por lo que "salir ahora a cuestionar el esfuerzo que se ha hecho es buscar un rédito que bien parece que no es el laboral y ponderar otros intereses que no son el general".