Según ha informado la Policía Local de Pontevedra, los hechos se produjeron el pasado sábado, 4 de diciembre, en un control conjunto de alcohol, drogas y velocidad, llevado a cabo agentes municipales y guardias civiles del Subsector de Tráfico de Pontevedra.

Era la primera vez que agentes de ambos cuerpos realizaban controles de alcoholemias y drogas. Estos operativos especiales, permiten duplicar el número de efectivos en el mismo control para poder comprobar la realidad de la combinación de alcohol o drogas en la conducción de vehículos, han explicado.

Así, entre las 23,30 horas del sábado, hasta la 1,30 horas, se realizó un control en la rotonda Médico Ballina, que abarcó las cinco entradas y salidas de la ciudad, con 500 vehículos controlados.

En concreto, hubo cuatro positivos en alcohol (todas denuncias administrativas), dos en consumo de drogas y dos por exceso de velocidad (radar).

También resultó denunciado, en este caso al juzgado, el citado conductor que, al observar el control policial, paró antes con el fin de cambiarse por el acompañante, maniobra que fue detectada por los agentes y que salieron tras él. Posteriormente se constató que esta persona no tenía permiso de conducir por no haberlo obtenido nunca.

Entre las 2,45 y las 4,15 horas se estableció un segundo control en la rotonda de la Avenida de Vigo y Josefina Arruti con el resultado de 140 vehículos controlados con cero positivo en alcohol, uno en drogas y dos por exceso velocidad (radar).

La previsión, dada la positiva experiencia, han señalado fuentes municipales, es que este tipo de controles de tráfico se repetirán a lo largo del año 2020.