La junta de gobierno local del Consistorio veleño ha aprobado la adjudicación para el suministro y mantenimiento de los desfibriladores (DESA), mediante contrato de renting, a la empresa AnekS3, SL, por un importe total de 170.755,20 euros. Contrato que incluye, además, una serie de actividades anuales como cursos de formación homologados, jornadas de concienciación y eventos cardioprotegidos.

El alcalde de Vélez-Málaga, Antonio Moreno Ferrer, ha valorado el importante paso que supone esta iniciativa en la mejora de la salud y seguridad de toda la ciudadanía y para prevenir situaciones de emergencia.

"Desde el Ayuntamiento seguimos apostando por mejorar las condiciones de nuestros vecinos y vecinas y de nuestros edificios municipales, dotándolos de herramientas como estas que permiten desempeñar el trabajo con mayor tranquilidad y que salvan vidas", ha agregado Moreno Ferrer.

Por su parte, la concejala de Recursos Humanos y responsable del área de Prevención, Lola Gámez, ha explicado que "hoy hacemos de Vélez-Málaga un municipio aún más cardioprotegido, además de mirar por el bienestar de los trabajadores municipales y de nuestros vecinos".

También Gámez ha indicado que "está pendiente solamente formalizar la firma del contrato con la empresa adjudicataria para comenzar a la mayor brevedad posible con la instalación de los desfibriladores".

Los espacios en los que se van a ubicar los desfibriladores son los diferentes edificios municipales; centros educativos, instalaciones deportivas, centros culturales, Jefatura de la Policía Local y los vehículos oficiales destinados a eventos deportivos así como vehículos oficiales Policía Local y vehículo oficial Protección Civil.

El Ayuntamiento de Vélez-Málaga ya fue el primer municipio de toda España que en 2017 decidió cardioproteger los colegios y guarderías municipales con la instalación de 21 desfibriladores. Además de implantar paralelamente el sistema antiatragantamiento 'lifevac' en los mismos centros.

En España, cerca del 80 por ciento de los ataques de corazón se producen fuera del ámbito sanitario, lo que hace más necesario si cabe tener a disposición tecnologías capaces de salvar vidas, como estos sistemas de primeros auxilios, que pueden ser utilizados con una formación básica y por personal no sanitario.