El presidente de la Diputación, Fernando Rodríguez Villalobos, ha señalado que esta cuantía se sumará a los adelantos por valor de más de 3,7 millones de euros asignados en la primera convocatoria del FEAR correspondiente a este año, resuelta en junio, a los ayuntamientos que concurrieron a ella. Así ha defendido el "compromiso" de la Institución provincial con la liquidez financiera de las arcas locales.

Al respecto, ha defendido que desde 2015, el FEAR se ha traducido en la entrega de 414,9 millones de euros a los ayuntamientos sevillanos "a coste cero", es decir sin intereses financieros, si bien siempre con cargo a su posterior recaudación tributaria.

Además, después de que el pleno celebrado por la Diputación este jueves haya aprobado dejar sin efecto dos de las modalidades de estos anticipos, la de "préstamos de mandato" y la habilitada para la cancelación de deudas con la Seguridad Social o con la Agencia Estatal Tributaria, -pues el Estado y la Junta han resuelto que tales adelantos "quedan fuera del marco legal aplicable"-, el Gobierno provincial socialista recuerda que "el resto de líneas se mantienen".

Las líneas restantes, así, están destinadas a anticipos reintegrables para la financiación de inversiones, los destinados a la refinanciación de operaciones de crédito a largo plazo y los enfocados a atender necesidades transitorias de tesorería.

En cualquier caso, la idea es "adaptar los FEAR a la nueva realidad de las tesorerías locales, después de que las entidades municipales hayan salvado la anterior etapa de crisis financiera en la que los anticipos fueron vitales para continuar prestando servicios a la gente". Ahora, "la intención pasa por hacer una convocatoria más flexible a lo largo del año, que cubra de una forma más especial las necesidades de los ayuntamientos", según la institución provincial.