Los expertos de SEPAR (Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica) recomiendan tomar precauciones evitando, por ejemplo, temperaturas demasiado bajas en los aparatos de aire acondicionado, así como llevar alguna prenda ligera de ropa que pueda proteger en lugares más fríos mientras el cuerpo se aclimata.

Asimismo, el aire acondicionado también fomenta la resequedad de las mucosas nasales, lo que origina molestias respiratorias, por lo que es muy importante vigilar la adecuada hidratación del cuerpo tomando suficiente agua.

Mantenimiento e higiene Por otra parte, los especialistas de SEPAR también recomiendan que los aparatos de aire acondicionado se conserven en

Los pacientes con enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) o asma, son especialmente susceptibles a los efectos del aire acondicionado al estar expuestos a sufrir agudizaciones de sus enfermedades, por lo que deben extremar las precauciones. Otros grupos de población especialmente vulnerables son los niños y ancianos.

Consejos prácticos

Los expertos aconsejan varias medidas para protegerse de los problemas que originan los sistemas de climatización. Son las siguientes:

- Revisiones. Deben respetarse rigurosamente las revisiones y los cuidados de mantenimiento que el fabricante de los sistemas de climatización aconseja. En caso necesario, hay que avisar inmediatamente a los técnicos de mantenimiento.

- Ambiente sano. Para que el ambiente creado por un sistema de climatización sea el correcto debe mantenerse una temperatura entre 22 y 24 grados, con una humedad relativa del aire del 35% al 60%.

- Analgésicos. El tratamiento para la fiebre de los acondicionadores (tiritona, malestar general y dolor de cabeza) debe basarse en calmar los síntomas con analgésicos y antitérmicos y retirar a la persona del ambiente climatizado. A menudo es muy difícil atribuir este proceso a su origen real y se confunde con otras causas.

- Catarros. Los catarros producidos por el aire acondicionado no suelen causar fiebre; sólo estornudos, rinorrea y congestión nasal. Lo más indicado es no volver a coger frío, evitar los cambios bruscos de temperatura y no exponerse demasiado al sol.

- No antibióticos. Como norma general, para estos procesos nasales o faríngeos no se deben tomar antibióticos, puesto que se trata habitualmente de afecciones de origen vírico.