Así lo ha trasladado este jueves la presidenta del comité del empresa de Sacyr Social y delegada de CC.OO., Mónica Márquez, durante la rueda de prensa convocada este jueves para dar cuenta de la "precariedad de la gestión del servicio".

Las causas que podrían haber llevado a Sacyr Social a tomar la decisión de cesar en la prestación del servicio serían, entre otras, la deuda de 1.190.000 euros que el gobierno municipal ha contraído con la empresa, según ha explicado CC.OO.

EL AYUNTAMIENTO "GARANTIZA" LA CONTINUIDAD DEL SERVICIO

Por su parte, la concejala de Política Social, Eugenia Díaz Abella, al igual que el portavoz del gobierno municipal, Miguel Caride, han trasladado este jueves que "el Servicio de Ayuda en el Hogar está absolutamente garantizado y se seguirá presentando con normalidad".

Respecto a los pagos pendientes, el Ayuntamiento de Ourense ha manifestado que "se están tramitando con la mayor celeridad dentro de las posibilidades administrativas actuales".

UN "EXIGENTE" PLIEGO DE CONDICIONES

Además, la presidenta del comité de empresa de Sacyr Social ha explicado que detrás de la ausencia de empresas en el concurso podría encontrarse el hecho de que "los usuarios tienen derecho a una suspensión temporal del servicio de hasta 90 días, durante los cuales la empresa no puede facturar pero tiene a una trabajadora disponible para prestar el servicio".

Esta posibilidad -recogida en el pliego de condiciones del concurso- "supone al año la suspensión temporal de 17.000 horas y que dejen de facturarse unos 300.000 euros, lo cual resulta perjudicial para las empresas", ha explicado Márquez.

Ante esta situación, las 205 trabajadoras de Sacyr Social quieren saber "en qué punto se encuentran" y comprenden la "preocupación" de los usuarios ante la incertidumbre de cómo se dará continuidad a la prestación del servicio.

En este sentido, la presidenta del comité de empresa ha aludido a que desde el Ayuntamiento ya se les ha trasladado que "la remunicipalización del servicio es inviable por su elevado coste" y ha dado a entender que "no concurriran empresas hasta que no se faciliten las condiciones".

En este contexto, desde el comité de empresa también han pedido al alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, que "no eche la culpa del concurso desierto a las trabajadoras veteranas diciendo que no quieren trabajar fuera de lo establecido en su contrato".