En total suman 18.500 sin papeles, según han informado a 20 minutos fuentes de Interior. La primera gran bolsa de 4.000 subsaharianos está repartida entre varias localidades marroquíes: Alhucemas, Nador, Oudja y Larache. Precisamente, de Alhucemas partió la patera que el 10 de julio llegó a Almería con 33 sin papeles a bordo. Otros 15 habían muerto durante la travesía, nueve de ellos niños.
Otras dos bolsas están en las ciudades mauritanas de Nuadibú y Nuakchot, cada una con 5.000 inmigrantes. La cuarta bolsa está en la localidad de Conakry, en Guinea, con otros 4.500 sin papeles.
Los subsaharianos de estas tres últimas bolsas tienen como destino Canarias. Las costas mauritanas se han convertido en un verdadero dolor de cabeza para la Guardia Civil. "De allí salen el 90% de los cayucos que llegan a Canarias", explican en la Benemérita. ¿Por qué? Por dos motivos: primero porque España y Mauritania aún no han renovado el convenio de retorno, por lo que los sin papeles que salen de sus costas y llegan a Canarias no pueden ser devueltos. Las mafias lo saben.
Moratoria de pesca
Y segundo, por el fin de una moratoria pesquera en Mauritania. Ahora, con el levantamiento de esa moratoria, centenares de cayucos de pesca han salido al mar. Y entre ellos se camuflan los que van cargados de inmigrantes rumbo a Canarias.
Fuentes de la Guardia Civil aseguran que con los radares SIVE y los medios materiales desplegados tanto en Canarias como en África es "prácticamente imposible que los cayucos mauritanos y guineanos no sean detectados antes de llegar al archipiélago".
España tiene desplegados en Canarias 11 patrulleras, tres de ellas de gran tonelaje para grandes travesías, dos helicópteros y cuatro aviones. Tres de esos barcos patrullan hoy las aguas mauritanas y senegalesas, estas últimas donde desembocan los cayucos que salen de Guinea.
Avalancha en Andalucía
La gran avalancha se espera en agosto en las costas andaluzas, donde ya han llegado este año 1.300 sin papeles. Oudja y Alhucemas están situadas a 180 km de Granada y Almería. Unos 4.000 subsaharianos permanecen escondidos en campamentos improvisados y casas abandonadas, incluso en la universidad de la ciudad de Oudja.
Pagan entre 300 y 1.000 1 por una plaza, en función de que salgan de Marruecos o de mucho más lejos, como Mauritania, Senegal o Guinea. Las pateras que parten de Marruecos no suelen llevar patrón, la gasolina es insuficiente para todo el trayecto y tienen pocos víveres. Las que parten del África subsahariano son más robustas, de más de 17 metros de eslora, con patrón y mejores motores.
Los inmigrantes llegados a las costas españolas durante el primer semestre han bajado un 7% respecto al mismo periodo de 2007, lo que supone 500 ilegales menos, según anunció ayer la Secretaría de Estado de Inmigración.
Clases de natación para llegar a Ceuta
Apenas 500 metros de mar separan la costa marroquí de la ceutí. Una distancia salvable si se es buen nadador. Las mafias han empezado a cobrar por dar clases de natación a los inmigrantes que quieren arribar a España. Con la llegada del buen tiempo, más de 30 subsaharianos han sido detenidos desde el 1 de mayo por la Guardia Civil cuando trataban de llegar nadando desde Marruecos a Ceuta.
Algunos de ellos iban incluso con aletas y flotadores. Los que pueden pagar más se hacen con un traje de neopreno.
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