La familia de Pedro Miguel Mérida Gallardo vuelve a no tener noticias sobre su paradero, tras el único contacto tenido con este hombre, natural de Baena, cuando fue detenido el pasado sábado.

Fue arrestado en la provincia de Jaén por su presunta implicación en más de 100 robos que habría cometido durante los 14 años que ha estado desaparecido, viviendo en cuevas y cortijos abandonados.

El hermano del nuevamente desaparecido, Fernando Antonio Mérida, dijo que, sobre su localización, no puede decir "absolutamente nada", y ello a pesar de que el pasado martes se les vio a ambos juntos saliendo del centro de transeúntes de Alcalá la Real (Jaén) donde el detenido pasó una única noche, tras decretar el juez su libertad hasta la celebración del juicio que se seguirá contra él por los citados robos.

Al parecer, ni su hermano ni la madre de ambos, Clara Gallardo, esperan que vuelva al domicilio familiar común en Baena, entre otras razones porque él no quiere volver. De hecho, llegó a pedir al juez que le tomó declaración que le mandase las citaciones a su cueva. El desaparecido

Al parecer, el presunto ladrón siempre perpetró los robos cuando no había nadie en las casas, a las que accedió forzando puertas o ventanas y de donde sustraía diversos objetos pero, sobre todo, comida.

Tras su detención, la Guardia Civil encontró los objetos robados en los refugios donde presuntamente ha estado viviendo durante los últimos años. Uno de ellos es un falso techo del cortijo abandonado de Pantalones, ubicado a cinco kilómetros del casco urbano de Luque.Otro de sus escondites son unas cuevas junto al

La desaparición

La familia de Pedro Miguel Mérida denunció su desaparición el 2 de febrero de 1994, día en el que, como cada mañana, acudió a su trabajo en un cortijo cercano al paraje del Puente de Piedra. En este lugar encontraron su motocicleta y su documentación, pero es donde definitivamente se perdía la pista de este hombre, del que no se halló rastro alguno.

Hasta ese momento trabajaba en una empresa agrícola en Luque y llevaba una vida normal. Al parecer, desde entonces ha vivido en el campo, aislado de la sociedad.

Desde el mismo día de su desaparición, la familia de Pedro Miguel Mérida Gallardo desarrolló una intensa labor de búsqueda, lo que incluyó una campaña a nivel nacional para intentar localizarle. De hecho, uno de sus hermanos incluso apareció pidiendo ayuda en un famoso programa de televisión de la época, '¿Quién sabe donde?'.

Sin embargo, todos los esfuerzos fueron en vano, de modo que, unos once años después de su desaparición y ante la falta de noticias, uno de sus hermanos inició en los juzgados de Baena el expediente para declararle fallecido.

El juzgado emitió un escrito el 20 de junio de 2005 en el que hizo pública la solicitud de los familiares de Pedro Miguel Mérida Gallardo y pidió información sobre su paradero, pero, a día de hoy, sigue inscrito como un vecino más en activo.

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