Este programa, que se aplicará desde la campaña 2008/2009 hasta la 2010/2011, es una medida complementaria de la OCM del vino que persigue la creación de un sector vitivinícola acorde con las condiciones del mercado, así como facilitar la retirada de las superficies de producción a aquellos viticultores que consideren que las condiciones de producción en la zona donde se ubican sus viñedos no son favorables.

Primas de arranque

Las primas por arranque se calcularán en función del rendimiento medio de la explotación. En el primer año serán un 20% superiores a las que se cobren en el tercero, mientras que durante el segundo año estarán un 10% por encima de las que se cobren al año siguiente.

En segundo lugar, se priorizará a aquellos viticultores que arranquen la totalidad de la explotación aunque sean menores de 55 años y, a continuación, a aquellos que sean mayores de 55 años aunque no arranquen la totalidad de la explotación.

Después se atenderán el resto de solicitudes. Las solicitudes que sean admitidas recibirán la resolución aprobatoria antes del 1 de febrero del próximo año.

Los agricultores deberán arrancar en la primavera de 2009 y percibirán la ayuda antes del 15 de octubre de ese año. La superficie arrancada está obligada a cumplir los requisitos de condicionalidad durante un período de tres años. Los viticultores podrán solicitar en la campaña siguiente al arranque el pago único por un número de derechos igual a las hectáreas por las que han recibido la prima de arranque.

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