En declaraciones a los periodistas antes de presidir la comisión provincial de Turismo y Seguridad, la subdelegada del Gobierno, Encarna Llinares, ha explicado que esta iniciativa, que ya se desarrolla en Madrid desde 2006, sería pionera en la Comunitat.

Agentes del Cuerpo Nacional de Policía se encargarían de atender a los turistas extranjeros en colaboración con el Patronato Provincial de Turismo y la patronal hotelera, ya que se precisa el uso de traductores.

El objetivo es "facilitar toda la tramitación al denunciar o en cualquier incidente" en caso de que el visitante sea objeto de un hecho delictivo, ya que este colectivo tiene "una problemática específica" como el desconocimiento del idioma y su sensación de desamparo por hallarse lejos de la familia y en un entorno desconocido, según Llinares.

La subdelegada ha declarado que ya se ha planteado esta posibilidad al Ayuntamiento de Benidorm aunque todavía no hay un acuerdo formal, y ha agregado que en la reunión de hoy tiene previsto "continuar insistiendo".

En su opinión, Benidorm es el lugar "ideal" para la sede debido al perfil de su turismo, aunque para desarrollar la iniciativa es preciso "implicar al sector empresarial", sobre todo a la patronal HOSBEC y al Patronato de Turismo, dependiente de la Diputación.

Esta es una de las propuestas que Llinares ha planteado en la comisión provincial de Turismo y Seguridad, en la que participan todos los sectores implicados y donde también les ha asegurado que el sector es "una prioridad para el Gobierno".

Llinares ha manifestado que el turismo, "una fuente de riqueza" para la Comunitat Valenciana, tiene que llevar aparejada la seguridad para convertir al destino en "atractivo".

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