El delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Máximo Díaz Cano, precisó en una rueda de prensa que se trata de dos grupos organizados que se dedicaban al tráfico de cocaína en sus respectivas localidades y entornos, el primero comprándola en Madrid y, el segundo, dirigido por ciudadanos colombianos que la importaban de dicho país a través del aeropuerto de Barajas.

Los agentes se han incautado, además, en estas operaciones, de un total de 90.000 euros en metálico, once vehículos, teléfonos, material informático e instrumental de pesaje. El agente detenido prestaba sus servicios en Almadén y se ocupaba de avisar al grupo con el que trabajaba de posibles operaciones que llevara a cabo la Guardia Civil y que pudieran afectarle.

Las operaciones, denominadas Mercurio y Cañas, han sido supervisadas por los juzgados de instrucción de Almadén y Villanueva de los Infantes y continúan abiertas, por lo que no se descartan nuevas detenciones. Las investigaciones se iniciaron a principios de año, cuando, en el marco del plan contra el menudeo de drogas en colegios y zonas de ocio, se detectó la existencia de varios puntos de venta de droga en las dos localidades ciudadrealeñas.

Operaciones Mercurio y Cañas

La operación Mercurio, desarrollada en Almadén, ha permitido detener a 19 integrantes de una red dedicada a traficar con cocaína en toda Ciudad Real tras adquirirla en Madrid. La red estaba perfectamente estructurada, cada integrante estaba especializado en su misión y tomaba "extremas medidas de seguridad" tanto en sus desplazamientos como a la hora de vender la droga.

La operación Cañas, puesta en marcha en Villanueva de los Infantes, ha permitido detener a doce presuntos miembros de otra red que se dedicaba a introducir droga en España procedente de Colombia a través del aeropuerto de Barajas mediante dobles fondos en maletas. Los "correos", residentes en Villanueva de los Infantes, recibían importantes sumas de dinero por desplazarse hasta Colombia y traer la droga.

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