La atípica primavera sufrida en la Península con bajas temperaturas y lluvias intermitentes han perjudicado el sector hostelero de Zamora. El retraso en la instalación de las terrazas ha supuesto una merma de ingresos cercana al 30%, según informa La Opinión de Zamora. "La meteorología adversa nos ha hecho perder parte de la campaña», señala el secretario de la Asociación de Empresarios de Hostelería (Azehos), Alfonso Gómez".

El montaje de estas instalaciones comienza en mayo y se prolonga hasta septiembre, sin embargo, la mayoría de los negocios han retrasado hasta esta semana la colocación de las terrazas. La Asociación de Hosteleros confía en que el tiempo acompañe los meses de julio, agosto y septiembre, aunque reconoce que "las pérdidas ya son irrecuperables". Además, reconocen que el descenso de beneficios se acompaña de un menor consumo debido a la pérdida de poder adquisitivo de los clientes.

Con el objetivo de compensar las pérdidas ocasionada por la falta de meteorología favorable los hosteleros anuncian que pedirán al Ayuntamiento que las tasas de las licencias municipales que pagan para poder instalar las terrazas se limiten «a la utilización real de las terrazas». «Si la temporada veraniega tiene 180 días y nosotros sólo podemos aprovechar 120 no tenemos por qué pagar por algo que no hemos usado», concluye Gómez.

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