Hasta 16.000 asturianos pueden comer gracias a los alimentos en buen estado recuperados de empresas que no han vendido todas sus provisiones, y de particulares. Si no fuera así, irían directamente a los basureros.

En 2007, el Banco de Alimentos de Asturias recogió 1.277.120 kilos en toda la región. Esta cantidad no supone la alimentación completa para todas estas personas, pero sí es una parte importante.

Se calcula que cada individuo consume entre 400 y 500 kilos de alimentos al año. Así que esta cantidad daría para el consumo total de, como máximo, 3.200 personas.

El Banco de Alimentos asturiano trabaja actualmente con 154 entidades sin ánimo de lucro, sociales, benéficas y asistenciales, que son realmente las que distribuyen la comida entre los 16.000 necesitados. Por ejemplo, las cocinas económicas o albergues.

Aproximadamente el 70% de lo que se recibe en Asturias de las empresas de la región son productos lácteos (unos 900.000 kilos).

También llegan productos no perecederos como arroz, lentejas o garbanzos de las conocidas como Operaciones Kilo, y bollería, gominolas o refrescos.

La crisis pasa factura a todos, también a las empresas y a los más necesitados. Se calcula que 142.150 ciudadanos que viven en Asturias lo hacen con menos de 500 € almes.

Según los datos del banco, en el primer trimestre de 2007 recibió 90.000 kilos de alimentos. Entre enero y marzo de este año, han llegado 55.000.

Es casi lamitad, y la reducción se debe a los ajustes que también están haciendo las empresas en su producción, por la crisis.

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