La operación, que ha contado con el apoyo de una patrullera y un helicóptero de seguimiento, ha permitido la incautación de 18 fardos de polen de hachís, cada uno de ellos con un peso medio de 27 kilos.

En ambas operaciones, registradas en la tarde de ayer, los fardos fueron arrojados al mar por los ocupantes de las dos embarcaciones objeto de la persecución.

La primera de estas actuaciones tuvo lugar frente a la costa de Denia, después de que los medios aéreos de vigilancia detectaran la presencia de "una embarcación semirrígida que, provista de cuatro potentes motores, se dirigía a gran velocidad hacia la costa".

Aunque posteriormente una patrullera del servicio de Vigilancia Aduanera de Alicante emprendió su persecución por mar, los tripulantes de la embarcación perseguida optaron por arrojar al mar los fardos de hachís que transportaban, cuatro de los cuales fueron recuperados.

Este hecho permitió, al quedar reducido el peso de transporte, la fuga de la lancha, han añadido las citadas fuentes.

Posteriormente, una segunda embarcación de similares características fue detectada frente a la costa de Torrevieja, por lo que la Agencia Tributaria estableció un operativo de seguimiento.

De los más de 100 fardos arrojados al mar, las autoridades recuperaron un total de catorce.

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