Pedro Alonso, el encargado de dar vida a Berlín en la exitosa serie La Casa de Papel, ha dado un giro radical a su vida.

Algo que ha querido compartir con sus seguidores en las redes sociales, que se cuentan por millones tras su carismático papel en la ficción que de Netflix.

Con un look muy cambiado a como acostumbra -una cabellera negra-, el actor sorprende con la cabeza rapada al cero y lo hace desde un lugar apartado del mundo, en algún rincón de la selva en América del Sur.

"Este es uno esos sitios en los que mi reacción se manifiesta al instante. Todo lo que respiro me confirma que es el lugar. Y que tenía todo el sentido cruzar el océano o lo que hiciese falta para llegar hasta aquí. El calor sofocante, la luz sobrecogedora cuando un momento después de estas imágenes el sol se entierre a cuchillo frente a mí en el corazón de la selva, la familiaridad con uno o dos guías hacia lo desconocido que te miran como si los conocieras desde hace mucho, los pequeños peces que mordisquean mi espalda cuando me baño en el Amazonas. Es una sensación", escribió el pasado septiembre el actor desde Perú, país al que da las "gracias".

Allí, como él mismo asegura en uno de sus hashtags, se mete en la piel del coronel Kurtz del Apocalypse Now de Coppola para tratar de finalizar su primer libro. "Sigo trabajando en la novela. Empiezo a pensar que todo este increíble viaje quizá algún día acabe. Solo espero estar a la altura, porque la historia es tan rebelde como hermosa", cuenta el intérprete.