La Policía Municipal de Madrid, con apoyo de la Policía Nacional, ha procedido a desalojar a las personas sin techo que acampaban desde hace varios meses en el Paseo del Prado, según han confirmado a Europa Press fuentes municipales.

La intervención ha tenido lugar en la madrugada de este viernes y se han desarrollado sin incidentes según han relatado las mismas fuentes.

El Ayuntamiento ha ofrecido a los acampados trasladarse a un centro de la red municipal para evaluar su vulnerabilidad. Según han informado a Europa Press fuentes municipales, en este centro se evaluará la situación de cada una de estas personas para ofrecer "soluciones individualizadas" para cada persona.

Precisamente este viertes los activistas de este campamento tenían previsto ofrecer una rueda de prensa para manifestar su postura ante los planes del Ayuntamiento de desalojar la zona.

Durante la intervención policial se han retirado 141 tiendas de campaña y tres veladores. A su vez, se ha identificado a 87 personas y se ha detenido a una persona con una reclamación judicial.

También se ha presentado una denuncia en virtud de la Ley de Protección Ciudadana y otra treintena por infracción de las ordenanzas municipales.

Un total de 94 efectivos de Policía Municipal de Madrid han conformado el dispositivo de desalojo y también se han movilizado tres dotaciones de Samur-Protección Civil (unas seis personas). A ellos se sumaban 50 agentes de Policía Nacional destinados en preventivo, que no han tenido que actuar.

Mientras, desde el Área de Medio Ambiente se ha destinado 16 camiones, un compactador, dos baldeadoras y dos barredoras, con un total de 45 efectivos, para limpiar la zona. Todo lo recogido se ha enviado al vertedero menos un camión de bienes inventariados.

Por su parte, 12 profesionales del Samur Social también han acudido al desalojo y se han empleado cuatro unidades móviles, un vehículo de mando y un autobús. En total se han atendido a 48 hombres y 9 mujeres.

Micky Carrera, uno de los portavoces de los acampañados, considera que la intervención de la Policía Municipal para desalojarles ha sido "manifiestamente ilegal". "La Policía Municipal no nos ha mostrado ninguna orden judicial que les autorizase a reprimir nuestra concentración de protesta y también ha vulnerado otros derechos, como el derecho a la intimidad, al abrir las tiendas donde estábamos algunas personas durmiendo y descansado, obligándonos a abandonar nuestra protesta", ha apuntado en declaraciones remitidas a los medios.

El alcalde de Madrid, Jose Luis Martínez-Almeida, ha asegurado que este desalojo es un "aviso" para otras ocupaciones ilegales de calles y edificios en la capital. Para Almeida, se trata de una muestra del Consistorio en su mensaje de que no se puede "ocupar ni privatizar de manera ilegal". Por ello, ha afirmado que no les "va a temblar el pulso para acabar" con las 'okupaciones'.

A su parecer, con este desalojo se ha querido solucionar un "problema que ya se había alargado demasiado en el tiempo". Afirma que las personas sin hogar han sido realojadas por el Ayuntamiento por lo que la acampada estaba "absolutamente injustificada".

Por otro lado, el regidor ha negado que se haya "precipitado" el desalojo ni que este operativo se debiera a la visita de expertos de la Unesco para evaluar la candidatura del eje Retiro-Prado como Patrimonio Mundial de la Unesco. Según ha explicado, el objetivo del Ayuntamiento era hacer este operativo de la forma "más eficaz y rápida" y con el "menor número de daños" para que se pudieran "conceder todos los derechos" ni que se "cometiera ningún tipo de abuso en el desalojo".

Las razones por las que el Ayuntamiento ha procedido al desalojo es por la existencia de varios informes. Así, había escritos del área de Salud donde se aconsejaba el desalojo por "razones sanitarias", otro de Medioambiente que destacaban los problemas generados en una zona "especialmente protegida" y otro informe del área de Cultura.

Los concentrados en el Paseo del Prado comenzaron con la acampada a mediados del mes de abril para hacer visible la situación de las personas sin techo en plena campaña electoral y exigir el cumplimiento de artículos básicos de la Constitución, como el derecho a la vivienda y el trabajo digno.

Apuntaban a través de carteles a que hay más de 32.000 personas sin techo, que el 65 por ciento tienen estudios de Secundaria y que el 15,4 por ciento son jubilados. Aparte, señalan que el 47 por ciento de las personas en situación de calle han sufrido agresiones.

Situaron su acampada frente al Ministerio de Sanidad para hacer hincapié la situación de "desamparo" que, en su opinión, sufren y exigir un compromiso por parte de la administración para tomar iniciativas "definitivas" que permitan acabar con el sinhogarismo.

En julio intentaron extender su protesta hasta las proximidades de Cibeles como gesto para reclamar al Ayuntamiento de la capital medidas para solucionar el fenómeno del sinhogarismo. En dicho mes realizaron una concentración donde pretendían instalar tiendas de campaña frente al Palacio de Cibeles. Ese día fueron desalojados de ahí por parte de la Policía Municipal, que procedió al arresto precisamente de Micky Carreras.

Por su parte, el Ayuntamiento de Madrid manifestó en agosto que había prestado ya ayuda a un total de 21 personas sin hogar que acampaban en la zona. En un primer momento, desde el propio Gobierno municipal se indicó que de todos los acampados únicamente eran 12 las personas sin hogar.