La chicas dicen tener más dificultades de los chicos para entender las matemáticas y resolver problemas que los chicos y también ellas, en mayor porcentaje, consideran que es importante estudiar algo que les permita estar en contacto con las personas y ayudarles a diario, y tengan, por lo tanto, un enfoque directamente social, por lo que rechazan las carreras STEM (científicas, técnicas, de ingeniería y matemáticas, por sus siglas en inglés).

Son algunas de las ideas clave que subraya el informe de DigitalES 'El desafío de las vocaciones STEM', presentado este martes en Madrid en un acto al que acudió la ministra de Educación y Formación Profesional en funciones, Isabel Celaá.

El estudio se adentra en por qué los jóvenes españoles descartan los estudios en ciencia y tecnología y que refleja el aumento del desinterés de los jóvenes por determinadas ramas profesionales, en especial la Ingeniería y la Arquitectura, en beneficio de las Ciencias de la Salud. Ese desapego hacia las ingenierías y tecnologías se percibe con más fuerza en el caso de las chicas.

Durante su introducción, la ministra apuntó que "las competencias STEM son cruciales para cualquier puesto profesional" y recordó que la fallida ley educativa que quería aprobar y que "por avatares de la política" no se ha tramitado en el Parlamento tenía como eje "educar a los alumnos desde su primera infancia en destrezas digitales".

Para Celaá, "la falta de formación o interés en las tecnologías y las TIC puede explicar el descenso en las vocaciones científicas", pues "cada vez son menos los interesados en cursar una ingeniería: son menos chicos, pero muchas menos chicas".

En este contexto, la responsable de Educación apostó por "formar" a los profesores e "informar" para sensibilizar a la comunidad educativa, las familias y a la sociedad de la importancia de la STEM. "Hemos de cultivar esa simpatía por las tecnologías, las ciencias y las matemáticas", recalcó.

Según el informe presentado este martes, entre el curso 2010-2011 y el 2016-2017, descendió un 28% el número de estudiantes matriculados en Ingeniería y Arquitectura, porcentaje que en el caso de las mujeres fue del 33% frente al 26% de los hombres. Por el contrario, en ese mismo tiempo hubo más matrículas en las carreras de ciencias de la salud, un 39% de media (un 36% más de mujeres y un 47% más de hombres).

Mientras tanto, destacan los impulsores del estudio, el mercado laboral está demandando cada vez más perfiles STEM, pues al menos hay 10.000 empleos vacantes en el sector tecnológico en España por falta de cualificación y se calcula que entre 2017 y 2022 la digitalización será la responsable de la creación de 1.250.000 empleos en España.

Ante este panorama, los expertos proponen promover las STEM entre alumnos y profesores de las etapas educativas más tempranas, reforzando, incluso, el peso de las asignaturas tecnológicas en el currículo educativo y romper con estereotipos asociados a las carreras más técnicas.

Para ello, subrayó Celaá, tendría que haber más chicos que trabajen en los cuidados y chicas en "la ingeniería y la informática". "Hagamos un ejercicio de reequilibrio", agregó, para lo que propuso impulsar que las chicas tengan "referentes" de mujeres científicas de éxito, pues, por ejemplo, las mujeres han ganado 17 premios Nobel en materias STEM, por 572 de los hombres.