La Unidad Orgánica de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Melilla ha logrado detener a cuatro personas, acusadas de realizar prácticas fraudulentas, a vehículos en mal estado, para que pasaran la ITV. La operación se inició hace un mes y medio, tal y como informó la propia Guardia Civil, y fue puesta en marcha gracias a la denuncia del director de la empresa IVESUR, encargada de gestionar los servicios de la ITV en la ciudad.

El director de la empresa IVESUR puso en conocimiento de la Guardia Civil determinadas “prácticas extrañas” que observó en uno de sus empleados. De esta forma se inició la investigación. Los agentes de la Guardia Civil, tal y como indicaron en el comunicado, consiguieron averiguar que el empleado denunciado era mecánico y se encargaba de efectuar las inspecciones técnicas.

Al parecer, hacía informes favorables a determinados vehículos “en muy malas condiciones, suponiendo un verdadero peligro para la circulación”. Los agentes denuncian que algunos de estos coches carecían de amortiguadores o frenos e incluso, “tenían los neumáticos gastados”.

Nuevas detenciones

La Guardia Civil ha podido saber que existe una empresa en Melilla que “sistemáticamente llevaba la mayoría de sus vehículos a este mecánico, consiguiendo el informe de inspección técnica siempre favorable”.

Los cuatro detenidos, todos varones, tres de ellos españoles y uno de nacionalidad marroquí, han pasado ya a disposición judicial. La operación continúa abierta y la Guardia Civil no descarta realizar más detenciones.

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