Las personas que quieran participar sólo tienen que acercar los juguetes a cualquier oficina que Caja Rural tiene repartidas por la geografía navarra, sean o no cliente. Después, tras un proceso de limpieza y rehabilitación realizado por personal voluntario de Nuevo Futuro, los juguetes se pondrán a la venta en el puesto de juguetes del Rastrillo que se celebrará en otoño en Pamplona y que este año cumple su 25 aniversario.

"Con esta campaña, el sencillo gesto de retirar los juguetes que ya no se usan se convierte en una acción con un impacto positivo para otras personas", ha destacado Nuevo Futuro en una nota.

Nuevo Futuro y Caja Rural han recomendado realizar esta tarea de limpieza y donación con los propios niños y niñas, con el fin de "ir concienciando a las nuevas generaciones sobre la necesidad de reutilizar los recursos". Además, con este proceso, la ONG busca generar recursos para los proyectos de promoción y defensa de la infancia y juventud en riesgo de exclusión social que desarrolla en Navarra y en países como Haití o Perú.

Gracias a esta campaña, el año pasado la ONG logró recaudar 10.000 euros por la venta de juguetes usados en el Rastrillo.