Los hechos ocurrieron la noche del 24 de octubre del 2005 en el interior del bar Oasis de Olot, propiedad de la víctima, Manuel Gordillo. Aunque el procesado siempre ha mantenido que al salir del bar la víctima estaba todavía con vida, el tribunal considera probado que el acusado entró en el local tras asegurarse que el dueño estaba solo y estaba cerrando y le pidió dinero.

Como Gordillo no se lo quiso dar, el acusado le golpeó hasta tirarlo al suelo, donde siguió dándole patadas por todo el cuerpo, incluida la cabeza, para posteriormente estrangularlo hasta matarle. Antes de abandonar el local, el procesado cogió una bolsa que contenía 390 euros y un sobre con varios números de lotería.

En la sentencia, la titular de la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Girona ha tomado en consideración la violencia ejercida sobre la víctima y que se usó "un doble mecanismo homicida" ya que tras golpearle fuertemente con un objeto afilado, le estranguló hasta matarle.

Por ello la sentencia ha condenado a Vallejo a una pena de 11 años y medio por el delito de homicidio y a 3 años y siete meses por el de robo con violencia, con el agravante de reincidencia. La reincidencia se debe a que el procesado ya había sido condenado en 1999 por la Audiencia de Burgos por dar un puñetazo en la cara a una anciana para robarle el bolso.

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