Los técnicos del grupo Aranzadi han encontrado los restos mortales de 22 personas fusiladas en los primeros meses de la Guerra Civil en una fosa común del cementerio municipal de La Puebla de Cazalla (Sevilla), según informa el sindicato CGT en un comunicado. El pasado 24 de marzo empezaron los trabajos para la recuperación de los restos de más de un centenar de personas asesinadas en el cementerio municipal de La Puebla de Cazalla durante las primeras oleadas del golpe militar de 1936 y la represión de principios de 1937. Siguiendo la misma línea de la cantera de arena de la que ya se han recuperado nueve cuerpos de fusilados, y tras varios días infructuosos en los que sólo se hallaba tierra de relleno, la máquina excavadora volvió a encontrar la misma línea de esa cantera unos metros más hacia el oeste y a dos metros de profundidad. Tras la aparición de varias botas y varios fémures el sábado 5 de abril, los expertos extrajeron trece cuerpos, a los que hay que sumar otros nueve recuperados días atrás. Además, los días 3 y 4 de abril el geo-radar confirmaba las sospechas que ya se tenían de que existen tres fosas más, distribuidas en forma de hileras o zanjas y paralelas al sitio donde se encuentran los actuales trabajos. Los familiares, junto con la Asociación Memoria Histórica y Justicia de Andalucía (AMHyJA), que cuentan con la subvención del Ministerio de la Presidencia, esperan que la Junta ultime un convenio con el ayuntamiento y la asociación para que aporte más fondos que permitan concluir los trabajos en la fosa. El minucioso estudio sobre la represión militar en La Puebla de Cazalla del historiador José María García Márquez, aún inédito, está aportando valiosos datos a los familiares que, con esperanza, miran en el mismo Cementerio los listados para saber el destino que tuvieron sus seres queridos, precisa el sindicato. Los participantes en estos trabajos esperan poder llegar a exhumar todos los cuerpos y hacerles un análisis por parte de antropólogos y los forenses para que el estudio genético haga posible devolver los restos a sus familiares y así poderles dar el entierro digno que todo ser humano se merece.