Según ha detallado la consejera de Empleo y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal, "el objetivo es colaborar con la OCDE en la puesta en marcha de un proyecto de innovación social dirigido a identificar tendencias y oportunidades sin explotar relacionadas con el futuro del trabajo en la Comunidad vasca, al objeto de mejorar el diseño de los programas de empleo llevados a cabo".

"Se trata de aportar información nueva y especializada sobre tendencias concretas en el campo de los puestos de trabajo y las repercusiones que tendrá la automatización en el País Vasco", ha añadido.

A través de este proyecto, se analizarán nuevas formas de empleo por sectores y actividades profesionales, y se identificarán los sectores más vulnerables a la automatización en el futuro. También se estudiarán los modelos de relaciones laborales para responder a la naturaleza cambiante del trabajo ayudando a las personas trabajadoras a adaptarse a las nuevas formas de empleo, garantizando la seguridad frente al desempleo.

En el proyecto se desarrollarán políticas para aumentar la oferta de competencias, dirigidas específicamente a los trabajadores de mayor edad, así como a jóvenes y trabajadores poco cualificados, para que puedan seguir en el mercado laboral. Otro análisis indicará las exigencias laborales para el futuro orientando mejor tanto el mercado laboral como los programas de desarrollo de capacidades para que el País Vasco se convierta en una región con actividades económicas de mayor valor.

"ESCENARIO CAMBIANTE"

Artolazabal ha señalado que la sociedad vasca, "como la del resto de Europa, se encuentra inmersa en un entorno socio laboral y económico complejo y cambiante". Así, ha añadido que "la globalización, los cambios en los modelos de gestión empresarial, los cambios demográficos y las nuevas tecnologías, son factores con un evidente impacto en el empleo", y ha indicado que los mercados laborales en todos los países "están experimentando una profunda transformación, ya que las competencias necesarias para trabajar están cambiando de manera significativa".

Según la consejera, "las personas profesionales en el ámbito de los recursos humanos han puesto de manifiesto una clara tendencia hacia nuevas formas de trabajo, y dichos cambios implican que una parte importante de los puestos de trabajo que existen en la actualidad pueden sufrir grandes reestructuraciones en el futuro, pudiendo llegar incluso a desaparecer". En ese sentido, ha indicado que "la digitalización y la automatización de los puestos de trabajo exigen a los trabajadores una mayor flexibilidad y resiliencia ante el carácter cambiante de la naturaleza del trabajo".

"Ello requiere replantearse cómo se diseñan y ejecutan los servicios de empleo y los programas de desarrollo de las competencias, con vistas a proporcionar oportunidades de aprendizaje permanente. En este escenario la política de empleo adquiere una gran relevancia", ha dicho.

Artolazabal ha recordado que la Estrategia Vasca de Empleo 2020, enumera, entre sus diferentes directrices de actuación, "diversas actuaciones estrechamente vinculadas al presente proyecto: la innovación social como oportunidad de generación de empleo; el desarrollo de la apuesta de especialización sectorial contemplada en la RIS3 vasca, potenciando su capacidad para generar empleo; y aprovechar de forma inteligente las oportunidades que ofrece la economía digital y la digitalización de la economía".

Dentro de la apuesta realizada por Euskadi por la especialización inteligente, Artolazabal espera un "crecimiento del empleo en aquellos sectores de oportunidad, tanto en aquellos orientados fundamentalmente a los mercados internacionales como en aquellos yacimientos que tienen que ver, sobre todo, con el aprovechamiento del potencial de crecimiento de la demanda interna".

OCDE

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico es una organización intergubernamental que fue fundada en 1961 y que agrupa a 35 países. Su misión es coordinar las políticas económicas y sociales de los países que la integran, así como promover políticas que mejoren el bienestar económico y social de las personas alrededor del mundo.

Lanbide y la OCDE impulsarán conjuntamente un proyecto dirigido a promover la adaptación del diseño de los sistemas de empleo y las competencias en el ámbito local para que respondan mejor al mundo laboral.

En una primera fase del proyecto se identificarán cuáles son las mejores prácticas desarrolladas en el País Vasco y las oportunidades para una mejor planificación de las políticas y de la prestación de los servicios en el futuro.

La OCDE examinará diversos puestos de trabajo, competencias e indicadores de desarrollo económico esenciales, al objeto de comparar las tendencias que existen dentro del País Vasco en relación con otras regiones de la OCDE. La OCDE realizará entrevistas a las diferentes oficinas de empleo de Euskadi, a las instituciones dedicadas a la formación, a las organizaciones para el desarrollo económico, a las cámaras de comercio y a los sindicatos.

La fase final del proyecto se expondrá dentro de doce meses y estará dedicada a la elaboración un informe definitivo, que será presentado a través de la realización de una conferencia internacional con expertos internacionales y profesionales que compartirán experiencias y proporcionarán información sobre diversos programas llevados a cabo internacionalmente.