José Fernando, hijo de José Ortega Cano y la fallecida Rocío Jurado, empieza a ver la luz al final del túnel después de un tiempo luchando contra sus adicciones a las drogas, un problema por el que permanece ingresado en el centro San Juan de Dios de Ciempozuelos (Madrid).

Michu, pareja de José Fernando y madre de su hija Rocío, ha publicado recientemente una imagen familiar de los tres en su cuenta de Instagram durante una visita el pasado fin de semana en el centro de rehabilitación, según informa ABC.

Sin embargo, lo que más llama la atención de esa fotografía es el cambio físico que ha experimentado el hijo de Ortega Cano y hermano de Gloria Camila como consecuencia del tratamiento por el que está pasando.

No es la primera vez que José Fernando pasa por un centro de rehabilitación, ya que en el pasado fue expulsado de uno en Sevilla y abandonó otro en Barcelona después de que su padre entrara en prisión tras ser condenado por un accidente de tráfico mortal. Desde entonces, fue multado por posesión de cocaína y detenido varias veces por quebrantar la orden de alejamiento de su pareja.

No obstante, todo eso ha quedado en el pasado y parece que José Fernando ha optado por alargar su estancia en este centro todo lo posible hasta estar completamente rehabilitado.