Efectivos del Área de Investigación de la Guardia Civil de El Vergel tuvieron conocimiento de una posible plantación de marihuana tipo 'indoor', en una vivienda de la localidad de Llíber, ha informado la Benemérita en un comunicado.

Los guardias civiles observaron visitas esporádicas de una pareja, que lograron identificar a pesar de las "extremas" medidas de seguridad que tomaban. Los responsables de la plantación utilizaban cámaras de vigilancia en la vivienda, así como el uso de vehículos, exclusivamente de alquiler, que renovaban frecuentemente.

La pareja, que pasaba desapercibida entre sus vecinos, tenía dos propiedades más, situadas en Parcent y L'Alfás del Pi, que fueron igualmente investigadas. Con toda esta información, los agentes solicitaron a la Autoridad Judicial la entrada y registro de las tres propiedades.

En los inmuebles hallaron cámaras de seguridad que vigilaban las 24 horas del día. El interior de las viviendas estaba ocupado por cultivos 'indoor', "completamente" automatizados, provistos con una domótica de última generación, con diez salas de cultivo monitorizadas de forma telemática, que podían observar desde sus teléfonos móviles o desde cualquier otro dispositivo portátil.

Las salas de cultivo indoor tenían un sistema eléctrico, de ventilación, filtración y regadío extremadamente avanzado, el cual permitía una rápida proliferación de la producción de la marihuana. Los detenidos presuntamente podían controlar los aparatos desde sus teléfonos y sellaban las salas herméticamente, incluso las puertas de acceso, para insuflar CO2 y acelerar los resultados de la producción. Con esta técnica, supuestamente lograba encadenar unas producciones tras otras.

Además, los sospechosos supuestamente se habían conectado a la red eléctrica de manera ilícita, mediante enganches ilegales. De esta formal

las tres casas, según los registros medidos por la empresa eléctrica, sumaban la cantidad de 80.000kw, es decir, el consumo habitual de 50 viviendas domésticas.

En los tres registros domiciliarios se ha intervenido un total de 1738 plantas de marihuana, en diferentes fases de crecimiento, 39.420 euros en efectivo, relojes de lujo, valorado solo uno de ellos en 55.000 euros y numeroso material, como un ordenador portátil, cinco teléfonos móviles de última generación, 126 lámparas de calor de gran potencia, 129 transformadores, 22 ventiladores, diez termohigrómetros, nueve extractores, 19 filtros de carbono, cuatro aires acondicionados, dos medidores de PH, tres sistemas completos de cámaras de vigilancia y dos reguladores de Co2, entre otros efectos.

A los detenidos, una mujer de 47 años y un hombre de 45, ambos de nacionalidad holandesa, se les imputan tres delitos contra la salud pública y otros tres delitos de defraudación de fluido eléctrico. Han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción Número 1 de Denia, que ha decretado el ingreso en prisión provisional sin fianza de ambos.