una declaración institucional, consensuada por todos los grupos políticos e impulsada por la Alianza Mar Blava, para apoyar la creación de un área especial de control de emisiones en el Mediterráneo, para "limitar la contaminación del aire producida por las embarcaciones".

El acuerdo también insta a coordinarse con la Comisión Europea y los estados comunitarios y extracomunitarios ribereños del Mediterráneo, para avanzar en el mismo sentido.

Como primer paso, el Consell pide que la red de puertos del Estado adopte, de "manera urgente", medidas para reducir la contaminación, como por ejemplo "obligar a las embarcaciones amarradas a conectarse a la red eléctrica portuaria para el funcionamiento diario".

El segundo punto de la declaración obliga a dejar constancia de todos los organismos vinculados al transporte marítimo y en la red de puertos estatales.

Según Mar Blava, las emisiones contaminantes de la navegación marítima "están detrás de 55.000 muertes prematuras anuales en la Unión Europea y causan 60.000 millones de euros en costes sanitarios".

El tráfico marítimo internacional genera el 40% de las emisiones de óxido de nitrógeno, el 44% del óxido de azufre y el 22% de las partículas finas, según datos oficiales del Gobierno.