La concejala de Hacienda de Gijón, Ana Braña (Foro), ha señalado este viernes que el Ayuntamiento cerró 2018 con un remanente de 35,2 millones de euros, de los que casi 2,7 millones de euros ya están comprometidos, y una ejecución de gasto del 86,36 por ciento.

Braña, en rueda de prensa en el Consistorio, ha señalado que el remanente supera al de 2017, que fue de 23,4 millones, aunque lo ha justificado por que en ese año hubo una alta amortización bancaria y se hizo un ejercicio de no disponibilidad.

Ha explicado, asimismo, que están pendientes del informe de estabilidad presupuestaria, que será el que determinará el uso del remanente ya sea para inversiones financieramente sostenibles o para libre disposición. Las cuantías para uno u otro se espera que se conozcan en un par de semanas, según la edil, aunque su destino podría dejarse en parte para que lo decida la próxima Corporación en el caso de las inversiones financieramente sostenibles.

No obstante, y preguntada por si habrá dinero para una convocatoria de la Renta Social, ha apuntado que primero habrá que ver las necesidades existentes y si sobra hacer una transferencia desde el Ayuntamiento si el remanente de la Fundación Municipal de Servicios Sociales no es suficiente.

En todo caso, ha recalcado que del remanente de libre disposición, ya hay comprometidos 1,6 millones de euros para pagar el incremento salarial y otros 600.000 o 700.000 euros para convenios no afectados por la prórroga.

En este caso, ha señalado que se retrasó el Pleno de marzo a finales de mes para poder llevar a aprobación las modificaciones presupuestarias de todos estos convenios. Braña ha insistido en que el capítulo uno, de personal, debe ir por delante de todo lo demás porque la subida de los salarios de empleados municipales es de obligado cumplimiento.

También ha recordado que si los grupos municipales hubieran dado su visto bueno al presupuestos, la Fundación Municipal de Servicios Sociales (FMSS) contaría con 1,8 millones de euros más y la Renta Social hubiera quedado "intacta" , ha asegurado.

Respecto al resto de datos de la liquidación, el presupuesto final ascendió a 317.500.000 euros, un cinco por ciento más que 2017 (302, 6 millones). En este sentido, se llevaron a Pleno modificaciones presupuestarias por valor de 115,3 millones de euros, ya que se partía de un presupuesto inicial de 202 millones .

La edil, asimismo, ha situado la ejecución total en un 86,36 por ciento,

superando así la de 2017 que fue de 81,82 por ciento . También ha señalado que se contabilizaron 13.731.000 euros de nueva deuda, lo que indica que se recurrió a un menor endeudamiento que en 2017, donde se contrató préstamo por 18,9 millones de euros. En 2018, además,

el Ayuntamiento cerró el año con un superávit de más de 17,6 millones de euros.

Braña, entre otros datos, ha destacado también el aumento en 4,2 millones de euros respecto a 2017 del capítulo 7, que supone un impulso importante a las ayudas a fachadas y barrios degradados, según ella. También ha incidido en que se terminó de pagar el préstamo de Gijón al Norte y los compromisos con la Zona de Actividades Logísticas e Industriales del Principado de Asturias (Zalia) y que, en el caso de ingresos corrientes se computaron 4,6 millones más pese a la congelación de tasas e impuestos.