En concreto, la citada última fase ha contemplado la remodelación de las tres alas del inmueble, incluyendo los puestos que quedan por arreglar tras las paulatinas intervenciones que el Consistorio ha promovido en los últimos siete años y que han permitido, como ahora, compatibilizar la función comercial del mercado con el desarrollo de dichas obras.

Esta última fase de actuación ha contemplado una inversión de 105.000 euros, aportados conjuntamente por el propio Ayuntamiento de Antequera y la Diputación Provincial, apoyo este último con el objetivo de la integración del proyecto Sabor a Málaga en el mercado municipal de abastos de Antequera.

Las obras han corrido a cargo de la empresa antequerana Anartec, comprendiendo desde la reforma de los 14 puestos que quedaban por arreglar hasta la mejora integral del suelo y el pavimento, incluyendo canalizaciones y saneamientos. También se ha arreglado el sótano, habilitando una rampa desde el exterior para acceder desde fuera del mercado a dicho espacio como originalmente se hacía.

De este modo, se mejoran por tanto las instalaciones de forma global y se siguen dando pasos en firme en pro de la accesibilidad al recinto, ha explicado.

Así, concluyen las actuaciones relativas a la remodelación del mercado de abastos, que alcanzan, una vez completada esta última, los 800.000 euros invertidos a lo largo de los últimos siete años a través del Ayuntamiento de Antequera.

A esta cifra, según han indicado, se le debe añadir la remodelación de la plazuela de San Zoilo, que también ha conllevado mejoras en su acceso al mercado así como en el contexto urbano del mismo, superando por tanto de forma global en el edificio en sí y sus alrededores el millón de euros de inversión.

Todo ello, han criticado "pese a la insostenible situación previa heredada por el anterior Gobierno del PSOE" en la que, tras tomar posesión Barón como alcalde en junio de 2011, "se reclamaban los tres millones de euros de subvenciones de fondos europeos anunciados con anterioridad para llevar a cabo otro, como el tiempo ha demostrado, faraónico e insostenible proyecto de los anteriores rectores socialistas".

Asimismo, Barón ha manifestado su satisfacción "por el hecho de haber conseguido hacer un trabajo sostenible y efectivo que ha tenido como resultado los dos principales objetivos que se planteaban, como eran el modernizar y remodelar el interior del mercado y compatibilizar las reformas con el hecho de que los comerciantes pudieran seguir desarrollando su actividad en el mismo recinto".