Un hombre asturiano de 36 años, vecino del Concejo de Cabrales, ha fallecido este domingo al despeñarse mientras practicaba esquí en Picos de Europa, en la zona cántabra. Su cuerpo ha podido ser rescatado este lunes por efectivos de la Guardia Civil.

La víctima practicaba esquí en la mañana del domingo en el macizo de Andara de los Picos de Europa, en el término municipal cántabro de Camaleño.Allí fue visto por última vez y una hora más tarde mantuvo una última conversación telefónica.

Después de que no regresase a su domicilio, a primera hora de la tarde, se informó de la desaparición a la Guardia Civil y familiares y amigos se desplazaron a la zona, donde hallaron el cadáver sobre las tres de la madrugada en una de las laderas nevadas del monte Montendiu, en Cantabria.

El Grupo de Rescate e Intervención en Montaña, cargo del operativo de evacuación, ha podido rescatar el cuerpo durante la mañana del lunes con la ayuda de un helicóptero.

Otros dos esquiadores han tenido que ser rescatados este domingo en la zona de Valdezcaray por los servicios del Equipo de Rescate e Intervención en Montaña (EREIM) de la Guardia Civil en La Rioja, con el apoyo de la Unidad Áerea de la Guardia Civil en el País Vasco.

El primer rescate se inició sobre las 12.12 horas, cuando agentes del EREIM vieron a un montañero precipitarse por el cortado denominado Los Tubos, durante 40 metros en caída libre y 100 metros ladera abajo.

De manera inmediata los agentes accedieron hasta la posición del accidentado y procedieron a realizarle primeros auxilios, dado que presentaba múltiples contusiones. Acto seguido, procedieron a trasladar al herido hasta el Hospital San Pedro de Logroño.

El segundo rescate se inició a las 15,30 horas. Responsables de la estación de esquí alertaron de la presencia de un esquiador que se había quedado bloqueado en una placa de hielo, mientras realizaba snowboard en el Pico Cabeza Parda. Para llegar hasta su posición, los agentes necesitaron usar piolets y crampones, dado el mal estado de la ladera.

El asistido estaba ileso, pero por la dificultad del descenso a pie se le trasladó en helicóptero hasta el parking de la estación de esquí, desde donde partió por sus propio medios hasta su lugar de residencia.