Con pancartas en las que se leía "Necesitamos un instituto y está a medio hacer, ¿cuándo estará terminado?" y "Aulas prefabricadas no, instituto ya", unas 300 personas, la mayoría padres de alumnos de los dos centros educativos de la diputación cartagenera de Pozo Estrecho, se manifestaron ayer por las calles de la localidad.

"Las obras deben estar terminadas para el próximo curso", puntualizó José Martínez, presidente de la APA del instituto de la localidad. En estos momentos, unos 600 estudiantes de primaria y 200 de secundaria, comparten las instalaciones en el mismo recinto, "algunos de ellos están en siete aulas prefabricadas", precisó.

Los padres del colegio y el instituto público de Pozo Estrecho continuarán hoy con las medidas de protesta. Una hora antes de que acaben las clases, los alumnos saldrán a la calle para denunciar la paralización de las obras.

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