Incursión sangrienta. Al menos 31 palestinos han perdido la vida y más de 75 heridos se han registrado desde el inicio de los enfrentamientos entre soldados israelíes y presuntos milicianos de Hamás en la ciudad de Sajaiya, en el norte de la Franja de Gaza, de acuerdo con fuentes palestinas.

Los enfrentamientos de este viernes comenzaron cuando varias unidades de la brigada especial Givati, protegidos por carros de combate, cercaron el barrio en una operación destinada a asaltar "infraestructuras terroristas" para evitar nuevos ataques con cohetes caseros perpetrados por las milicias palestinas contra localidades del sur de Israel, según el diario israelí Yediot Aharonot.

Varios civiles

La mayoría de los palestinos fallecidos son guerrilleros de Hamás y de la formación miliciana Yihad Islámica, pero entre las víctimas mortales se encuentran también varios civiles, de acuerdo con fuentes médicas palestinas, entre ellos dos niños de 9 y 10 años, así como un padre y su hijo.

De los soldados heridos, dos de ellos se encuentran en estado grave y han sido trasladados al centro médico de Soroka, en Beersheba. En respuesta a la operación israelí, las milicias palestinas han lanzado no menos de 20 cohetes contra poblaciones del sur de Israel, impactando en Sderot y en Ashkelon. Este último objetivo suele ser inusual dentro de estos ataques, porque se encuentra bastante alejado de las comunidades que las milicias suelen atacar.

Misiles con gran poder destructivo

No obstante, una portavoz del Ejército israelí ha confirmado que los guerrilleros palestinos han empleado al menos tres misiles Grad, empleados por las antiguas tropas de la Unión Soviética, y que tienen mayor autonomía y poder destructivo que los tradicionales cohetes caseros Qassam empleados por las milicias. Fuentes oficiales israelíes han informado que el Gobierno de Tel Aviv está contemplando a