Una torre en plena línea de costa en la localidad coruñesa de Sada es el inmueble más caro de Galicia: cuesta 3,6 millones de euros. Está ubicada sobre un solar de 50.000 metros cuadrados, tiene 3.000 metros cuadrados de superficie, 11 habitaciones, dos baños, piscina... Todos los lujos imaginables. También la segunda más cara, por 3 millones de euros, está en la provincia de A Coruña, en la localidad de Oleiros. La más barata se encuentra en Xinzo da Limia (Ourense). Se trata de una casa rústica de 140 metros cuadrados para restaurar que cuesta 30.050 euros. Por 6.000 euros más se puede comprar un piso en Vilalba (Lugo).
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