Las investigaciones fueron llevadas a cabo por agentes de la Brigada de Policía Judicial de la Comisaría Provincial de Alicante, los cuales se centraron en recopilar varias denuncias que interpusieron diferentes víctimas desde mediados del mes de diciembre.

Las diferentes líneas de investigación se centraron en las pesquisas que se recabaron en cada uno de los robos. Los presuntos autores tenían un mismo 'modus operandi' para acceder a los inmuebles. En todos los casos, los ladrones escalaban por la fachada del edificio para forzar más tarde la cerradura o cualquier obstáculo que les impedía acceder a la vivienda y poder así obtener su botín.

"Tenían las tareas delictivas bien distribuidas", han explicado desde la Jefatura. Mientras uno de ellos accedía y saqueaba la vivienda, el otro vigilaba la calle y el portal de la misma.

Debido a las pruebas que se fueron obteniendo en las diferentes viviendas, los agentes encargados del caso pudieron centrar quiénes eran los posibles autores de los robos.

Los investigadores siguieron a los presuntos ladrones mientras se desplazaban en un vehículo y cuando estacionaron el mismo en la puerta de su domicilio, los agentes observaron que tenían aves dentro del maletero, por lo que procedieron a registrarlo. En su interior encontraron parte de los palomos de competición sustraídos en una de las viviendas, por lo que los policías detuvieron a ambas personas por un presunto delito de robo con fuerza en domicilio.

En el registro llevado a cabo en el domicilio de los detenidos, los agentes intervinieron un vehículo y recuperaron diversos ordenadores portátiles, televisiones, dispositivos de memoria, teléfonos móviles, diversas piezas de joyería, trajes regionales y 19 palomos de los 38 sustraídos, entre otra gran cantidad de objetos, todos ellos procedentes de los presuntos robos.

Con estas detenciones se han esclarecido un total de seis robos con fuerza en domicilio. Los detenidos fueron puestos a disposición del Juzgado en Funciones de Guardia de Alicante.