En la oficina de Información Urbanística (San Nicolás, 2) me comunican que «no hay ningún problema» oficial para que la edificación se reanude y que la licencia de esta obra mayor, particular, se otorgó el 14 de septiembre de 2005, hace dos años y medio. El 20 de marzo de 2007, su promotor solicitó una prórroga de seis meses para la edificación, recientemente concedida.

El expediente (PL 288 de 2004) se encuentra ahora en el Departamento de Obras Particulares, me indican en la oficina urbanística de la plaza de San Cristóbal, 14. La ley 16/2005 otorga dos años de plazo para la ejecución de una obra, aunque los ayuntamientos pueden prorrogar este periodo por problemas ocultos o por imprevistos ajenos al constructor, como la aparición de aguas subterráneas o un corrimiento de tierras.

El promotor de la obra, Ricardo Giner, me relata, sincero, «el infierno vivido», con «pérdidas millonarias», porque «el solar es muy difícil». Y detalla que los estudios geotécnicos no se hicieron bien, que no se encontraba suelo firme, que hubo problemas con las catas arqueológicas y el diferencial eléctrico y que, encima, una pared medianera se derrumbó (tras una tormenta) y retrasó la obra por razones de seguridad. Giner garantiza que «pronto» retomará la construcción.

Sobre la basura acumulada, en la Concejalía de Servicios me explican que «es obligación del propietario del solar mantenerlo en perfectas condiciones higiénicas» y que «cuando el Ayuntamiento recibe un parte de sus inspectores de limpieza o una denuncia ciudadana sobre un solar que no reúne las condiciones requeridas de vallado y limpieza, se requiere al propietario para que subsane la deficiencia». Si se inhibiera, «se iniciarían los trámites necesarios para que, de manera subsidiaria, intervengan los servicios municipales», con gastos a cargo del dueño y una posible sanción.

EVALUACIÓN DE LA RESPUESTA

Concejalía de Urbanismo: Aprobado

Concejalía de Servicios: Aprobado