Lleva cuatro años presentando las Campanadas en Antena 3, y este año repetirá junto Alberto Chicote, en la Puerta del Sol. Pero para Cristina Pedroche no es una noche más, ya que le encanta tener a parte de la audiencia pendiente de la cantidad de transparencias que tendrá su vestido en la última noche del año, y temporada a temporada, congrega a más espectadores delante del televisor.

La presentadora fue la protagonista de El hormiguero de este miércoles, donde le confesó a Pablo Motos que "estoy feliz porque ha pasado a ser un evento en el que la gente espera a ver un vestido, aunque no me importa que esa noche España se divida en si les gusta mi vestuario o no", admitió. Además, no entiende la expectación o polémica alrededor del vestido, y preguntó: "¿Por qué no pasa lo mismo con el traje de Alberto Chicote?"

Pedroche se atrevió a dar algunos detalles para aumentar la expectación: "Es un vestido con el que mucha gente va a soñar. Es que es Nochevieja y me quiero sentir Beyoncé", comentó entre risas. Y añadió: "Es un vestido que se podría poner en cualquier concierto". Pero tiene un largo periodo de preparación porque lleva "desde enero con una idea aproximada, por eso sigo tantos sitios de moda en Instagram, pero en agosto tuve la revelación divina", comentó.

Además, añadió que el de este año "es más arriesgado, el que menos tiene que ver con los anteriores, pero es el más Pedroche de estos cinco años". Es más, "quienes me conocen van a decir: ¡qué hija de puta!, me encanta", añadió, riéndose junto a Motos. Eso sí, Pedroche comentó que entre sus preferencias están "los brillos y las transparencias. Además, cuando algo te gusta, ¿para qué cambiar?". Aclaró, no obstante, que "no son las típicas transparencias".

Aparte de hablar del vestido, la madrileña comentó algunas de sus aficiones, como la de comer castañas, admitiendo que "me las tomo casi sin respirar: mi madre me prepara unas cuantas para que me duren una semana y me las como de una tacada", o el yoga, práctica que comparte con Pablo Motos, y en la que incluso se atrevió a demostrar su elasticidad. Después, ambos presentadores cogieron sus móviles y se siguieron mutuamente en Instagram.