Vivir en la capital es sinónimo de pagar más tributos que el resto. Y es que la ciudad de Córdoba es el municipio de la provincia con más de 7.500 habitantes donde la presión fiscal es más elevada en la mayoría de los impuestos locales. Así se desprende de un estudio de la Confederación de Empresarios (CECO), en donde se observan diferencias de hasta un 400% entre las tasas que se pagan en la capital y en el resto de las localidades. Es el caso del impuesto para pedir una licencia comercial

Las mayores diferencias se observan en el abono de las tasas para conseguir la licencia de apertura de un establecimiento. El informe toma como ejemplo un local de 150 metros cuadrados y un valor catastral de 10.000 euros. En ese caso, los habitantes de la capital han de pagar 2.696 euros, frente a los 494 que se registra de media en los municipios de más población de la provincia, es decir, cinco veces más.

Difícil para construir

Aquí también hay que rascarse mucho más el bolsillo que en los pueblos para tener un permiso de obra. Para poder construir un edificio de ocho pisos de 120 metros cuadrados cada uno y un coste real de 200.000 euros se requiere abonar en la capital unos 4.982 euros, cuatro veces más que en la provincia.

La recogida de basura tampoco se escapa a estas enormes diferencias. De media, en la ciudad de Córdoba se paga el doble que en el resto de la provincia. No obstante, la capital no es la localidad donde se abona más dinero por este servicio, sino que es Montilla.

En el caso de los impuestos de actividades económicas (IAE), el de vehículos y el de construcciones (ICIO) la capital también es líder indiscutible. Sólo en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) de naturaleza urbana la ciudad no ostenta este puesto, que se queda para Hinojosa del Duque.

El presidente de CECO, Luis Carreto, indica que, en cierto modo, es normal que la capital tenga más presión fiscal «porque sus servicios son mejores».

Falta suelo industrial

Es uno de los grandes problemas socioeconómicos que tiene Córdoba. Al menos, así lo piensan desde CECO, cuyo presidente, Luis Carreto, reclama «urgentemente» la creación de suelo industrial en la capital. «Esto es como la pescaílla que se muerde la cola, ya que sin una oferta suficiente de suelo no habrá nuevas empresas, y sin nuevas empresas no hay más empleo en la ciudad», recalca el dirigente de la patronal. En relación a la material fiscal, los empresarios solicitan a los ayuntamientos que «armonicen» sus tributos, de manera que no haya tantas diferencias según el municipio.