Los hechos se desencadenaron tras la denuncia del responsable de un comercio de la capital comunicando que un terminal móvil valorado en 900 euros había desaparecido del escaparate del local.

En este sentido, la investigación policial permitió localizar el teléfono sustraído en un establecimiento de compraventa de artículos de segunda mano, donde había sido vendido por un hombre que, una vez identificado y localizado, fue detenido como presunto autor de un delito de hurto.

Por su parte, las gestiones policiales permitieron comprobar que el arrestado había participado en un robo con fuerza cometido en una peluquería de la zona sur de la ciudad el pasado mes de septiembre.

Durante el mismo y tras acceder a la fuerza a través de una ventana de la citada peluquería, el arrestado sustrajo la caja registradora, que fue recuperada a escasos metros del lugar de los hechos por los agentes.