Salvador ha asegurado que el objetivo de la administración autonómica es "empezar a trabajar con los estudios y los cálculos encima de la mesa y de una forma consensuada con ellos", según ha indicado la Generalitat en un comunicado .

Así lo ha asegurado después de que el director general de Vivienda, Rehabilitación y Regeneración Urbana, Rafa Briet, y la gerente de la Entitat Pública d'Habitatge i Sòl (Evha), Laura Soto, hayan mantenido una reunión con representantes de los vecinos.

La titular de Vivienda ha detallado que la propuesta planteada por la Generalitat se basa en las ayudas estatales, autonómicas y locales dentro del marco del Plan Estatal de Vivienda 2018-2021 a través del Área de Regeneración Urbana (ARRU).

En este sentido, ha señalado que el objetivo es poder ofrecer a los vecinos "viviendas de calidad y que sean viables técnica y económicamente" y, ante esto, ha advertido que "las ayudas previstas para la construcción de un nuevo inmueble son más ventajosas que para la rehabilitación integral".

Según los cálculos realizados por los técnicos, estas ayudas "podrían llegar a ser, como mínimo, de un 65% de los costes de ejecución, a los que se podrían añadir otras ayudas subjetivas, atendiendo a las circunstancias personales de cada vecino, que pueden llegar al 35% del presupuesto, por lo que, en algunos de los casos, se podría alcanzar al 100% de subvención", ha destacado.

De esta forma, con estas ayudas se puede llegar a recibir hasta 30.000 euros por vivienda reconstruida por parte del Ministerio de Fomento, un 20% en el caso del Gobierno autonómico y un 5% desde el Ayuntamiento.

Por ello, "se ha estimado que cada vecino podría tener que asumir solo un coste de unos 370 euros por metro cuadrado de vivienda, sin considerar las posibles ayudas subjetivas", ha avanzado.

En cambio, para las ayudas de rehabilitación, desde el Ministerio de Fomento se contempla una cantidad solo de hasta 12.000 euros por vivienda, por lo que el coste que tendría que asumir cada propietario, sería de unos 900 euros por metro cuadrado, según la Generalitat.

ESTUDIO TÉCNICO

Esta propuesta nace de las reuniones técnicas que han mantenido los representantes de la Generalitat con los técnicos del Plan Cabanyal-Canyamelar y del Ayuntamiento de València. Parte de las conclusiones del informe de AUMSA sobre el estado de conservación del edificio y del estudio de los costes económicos que supondría su rehabilitación o reconstrucción, elaborados ambos por el IVE. Además, la próxima semana también está previsto trasladar el desarrollo del detalle de esta propuesta en otra reunión con todas las instituciones implicadas.

La consellera ha indicado que "esta propuesta es viable dado el mal estado de conservación en el que se encuentra la estructura de hormigón de la construcción, con muy bajas resistencias del material y zonas con avanzada corrosión".

El estudio realizado por el IVE especifica que "las fachadas y cubiertas carecen de aislamiento térmico y hay presencia de humedades de forma generalizada, hecho que condiciona la habitabilidad de algunas de las viviendas; a lo que hay que añadir también los problemas de accesibilidad".

Ante esta situación, los responsables de la Generalitat han trasladado esta propuesta de reconstrucción a través de las ayudas vinculadas al ARRU a los representantes vecinales, al considerar que este planteamiento está "estudiado, es viable técnica y económicamente y se ha hecho contando con los intereses de los propietarios al garantizar una solución habitacional de calidad para cada una de las personas afectadas".

Por ello, han esperado que sea un "punto de arranque" para poder dar la solución definitiva a la problemática situación de este grupo de viviendas.