En Formigal los espesores oscilan entre 70 y 110 centímetros de nieve polvo y hay 128 kilómetros esquiables, la mayor superficie abierta de su historia. Cerler, por su parte, tiene nieve polvo de entre 55 y 145 centímetros en sus 63 kilómetros abiertos. El espesor en Panticosa varía de 35 a 90 centímetros de nieve polvo y 14 remontes en activo.

Candanchú tiene 44 pistas abiertas con nieve polvo de entre 30 y 55 centímetros de espesor. En Astún se podrá esquiar en 39 pistas y la nieve es polvo y primavera. Los espesores van de 60 a 70 centímetros.

En Javalambre hay 7 kilómetros con nieve polvo y en Valdelinares, 7,5. Los espesores van de 20 a 130 centímetros.