Precisamente, educar en ese mensaje de responsabilidad es el objetivo de la jornada sobre 'La tarta y la explotación sexual' que se celebra este miércoles, de 9.30 a 20.00 horas, en el Museo Patio Herreriano de Valladolid. Estas ponencias tuvieron su precedente en 2016 y este año llegan con una amplia programación de expertos.

El programa del evento prevé, además de la del alcalde, las intervenciones de la concejal de Educación, Infancia e Igualdad, Victoria Soto; de la activista feminista y superviviente de prostitución y trata Amelia Tiganus; del inspector jefe de UCRIF de la Comisaría Provincial de Valladolid, Carlos Belmonte, y de las entidades Médicos del Mundo, Asociación de Ayuda al Drogodependiente (ACLAD), el centro de día Albor y la Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención a la Mujer Prostituida (APRAMP).

Aunque el primer edil ha recordado que en la capital vallisoletana "no existe una situación alarmante", eso no le ha impedido trasladar un mensaje de "compromiso" a la ciudadanía. "En este momento, en el término municipal de Valladolid, afortunadamente, no hay constancia de víctimas de trata", ha afirmado.

La explotación sexual es "una forma moderna de esclavitud y supone una vulneración de la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948", ha apuntado Puente. Sin embargo, en lo que respecta al debate entre la prohibición y la regulación de la prostitución, el alcalde ha aseverado que se trata de una decisión que "excede lo municipal" y, por tanto, debe producirse en el ámbito nacional. "Son los partidos políticos a nivel global quienes deben fijar su posición acerca de este dilema", ha insistido.

"Se sabe que donde existe prostitución, existe trata", ha resaltado Victoria Soto, quien ha recordado, además, los programas de formación y atención al colectivo de mujeres prostituidas en los que el Ayuntamiento colabora con el centro de día Albor y con ACLAD, en los que participan más de 15 mujeres. Asimismo, ha señalado que el programa municipal de inserción laboral también incluye a mujeres que hayan ejercido la prostitución.

Para combatir el porblema, Soto ha solicitado a todas aquellas entidades de toda índole en posición de ayudar, que el Consistorio "está dispuesto a colaborar con todas ellas". En este sentido, ha explicado que ya está en marcha la cooperación con la iglesia protestante, "religión mayoritaria en muchos de los países de origen de las mujeres víctimas de trata".

Por último, ha solicitado a la sociedad que haga autocrítica porque, "en muchas ocasiones, la forma de terminar las fiestas consiste en consumir prostitución", ha lamentado, y ha recordado que "si se consume prostitución, se alienta la trata".

"No se puede consentir que eso ocurra en una sociedad moderna", ha agregado, por lo que es necesario "educar y sensibilizar", que es la tarea de estas jornadas, además de "invitar a reflexionar sobre si es necesario incrementar medidas para atajar este problema".