El Juzgado de Instrucción 27 de Barcelona ha dictado órdenes de búsqueda y captura contra 20 personas en su investigación contra los narcopisos del distrito barcelonés de Ciutat Vella.

Estas 20 personas se suman a los 55 detenidos el lunes en la operación de los Mossos d'Esquadra y la Guàrdia Urbana contra la red que suministraba heroína y otras drogas a narcopisos del Raval, según un comunicado de los Mossos este martes.

Los agentes hicieron 40 registros en este barrio, Poble Sec y Nou Barris, y otros municipios como Esplugues de Llobregat, Badalona y L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona).

Se movilizaron unos 700 agentes de los Mossos y 150 de la Guardia Urbana: desde las 7 horas del lunes entraron en 27 narcopisos en Ciutat Vella y otros 13 domicilios, y en estos segundos inmuebles supuestamente vivían los responsables de esta organización liderada por dominicanos, según la policía catalana.

La intendente subjefe de la División de Investigación Criminal (Dic) de los Mossos, Marta Fernández, declaró a los medios el lunes que la investigación empezó en abril liderada por la Dic, junto con la unidad de investigación de Ciutat Vella y la Guardia Urbana.

La comisionada de Salud de Barcelona, Gemma Tarafa, ha explicado que la narcosala de Baluart recibió 77 personas consumidoras la noche de este lunes después de la operación en Barcelona contra narcopisos, una cifra que considera "elevada", aunque está dentro de los parámetros.

En declaraciones a la prensa, Tarafa ha explicado que, desde este verano, se han registrado entre 30 y 88 consumos por noche, y que la noche del domingo al lunes se produjeron 55: "Después de la macrooperación acudieron 77 personas consumidoras. Es una cifra más elevada que la noche anterior, pero está dentro de los parámetros".

"Lo que hemos hecho es alertar a los educadores para reforzar su trabajo en esta zona. Los 23 educadores han reforzado aquellas zonas en las que se han cerrado narcopisos para acompañar a las personas consumidoras que están en la vía pública", ha detallado la comisionada, y ha añadido que el 10% de las personas que entran en un espacio de venopunción se acogen a programas de desintoxicación.