Según informaron fuentes del servicio de emergencias 112, sobre las 14.55 horas de hoy se recibió una llamada del 061, que había sido alertado por los compañeros del joven, quienes explicaron que había comenzado a sentirse mal.

Ellos fueron los primeros en atender a la víctima, que estaba en una de las habitaciones de la residencia anexa a la UNIA, mediante técnicas de reanimación cardiovasculares.

Una vez allí, los servicios médicos hicieron todo lo posible por salvar la vida al estudiante, aunque no tuvieron éxito, de modo que fue el forense quien después confirmó que el fallecimiento se había producido "por causas naturales". En el lugar de los hechos también se personaron agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local de Baeza, que recibieron el aviso por parte del 112.

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