Las ayudas de emergencia social que concede el Ayuntamiento de Bilbao crecen a un ritmo frenético. En apenas cuatro años, han subido un 60%.
Si en 2003, el consistorio concedió un total de 6,45 millones de euros en subvenciones ayudas al alquiler, mantenimiento de viviendas, compra de mobiliario y otras necesidades primarias, en 2007 se concedieron 10,36 millones, casi cuatro más.
Y, paralelamente al dinero destinado para estas ayudas sociales, el número de perceptores también se ha incrementado. En 2007 fueron 7.550 beneficiarios, cuando en 2003 habían sido 4.851 y en 2001, 3.836. Durante estos años, por tanto, se han duplicado.
Estos datos tienen una traducción: la marginalidad, los índices de pobreza y las dificultades para llegar a fin de mes aumentan al mismo ritmo en la ciudad. Así lo denunció el PP de Bilbao, quien exigió al Gobierno municipal de Bilbao que mejore las políticas de empleo para que no haya tantos bilbaínos en paro.
Por cierto, los residentes extranjeros --en Bilbao son el 6,1% de la población (354.000 habitantes)-- representan gran parte de estas ayudas. De las 7.550 concedidas en 2007, un total de 2.469 son ayudas para extranjeros, la tercera parte (el 32,7%).
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