La actriz norteamericana Sarah Jessica Parker ha sido acusada por la joyería Kat Florence Design de haberse quedado unas joyas que le fueron prestadas para una sesión de fotos en marzo de 2016, según informa el portal Pageseix.

Este medio, especializado en información de famosos, ha accedido a los documentos judiciales en los que la joyería acusa a Parker de no haber devuelto unas piezas valoradas en casi 150.000 dólares (unos 128.000 euros).

La actriz protagonista de la serie 'Sexo en Nueva York' lució las joyas en una sesión de fotos publicitaria para la empresa y después pidió que le prestaran a título personal varias de las piezas, que devolvería en un plazo de dos meses.

El abogado de Kat Florence Design dijo al medio que la joyería accedió a prestarle unos pendientes de casi 41.000 dólares (35.000 euros) y un anillo de más de 27.000 (23.000 euros), entre otras piezas, pero como dos años después no los ha recuperado, Parker debería pagarlos.

Las partes tienen programada una reunión con un mediador para resolver el caso este viernes en Nueva York, señaló el letrado.

Por su parte, el abogado de la actriz, Ira Schreck, contestó en ese mismo medio que las acusaciones de la empresa son "totalmente falsas". Señaló que Parker tenía un "contrato" con la joyería, que le pidió "que se quedara las joyas y las llevara en alfombras rojas y otros eventos cuando fuera apropiado".

Schreck, que califica a su clienta de "honesta", aseguró que Parker ha insistido a la joyería "desde que injustamente dejaron de pagarle para que devolviera las piezas, pero Kat Florence no parecía interesada en recuperarlas".

El pasado mes de abril, la joyería ya denunció a la actriz por el supuesto fracaso de la línea de joyas en la que había colaborado, incluyendo la promoción —un negocio de 7,5 millones de dólares (6,4 millones de euros)—, tras lo cual ella respondió con otra demanda, acusando a la firma de no pagarle pese a que ella cumplió sus obligaciones.