Al personaje televisivo Kiko Matamoros y a su representante Makoke Giaver se les ha acabado el amor tras dos décadas compartiendo sus vidas. La noticia la da en exclusiva la revista Lecturas, detallando que la pareja se divorcia tras dos años de matrimonio, veinte de relación y una hija en común.

Kiko y Makoke formaban una de las parejas más sólidas y longevas del espectro televisivo español, resistiendo durante años los vaivenes familiares y las situaciones de presión a las que el mundo del corazón les ha sometido en numerosas ocasiones.

A pesar de que el (todavía) matrimonio no ha dado la noticia, Lecturas recoge desde hace años las exclusivas de los colaboradores de Telecinco.

La revista describe la ruptura como "inesperada e inevitable", una situación provocada por problemas "familiares y económicos" de ambos. Estos problemas aludirían a la mala relación entre Diego Matamoros y Ana, la hija en común del matrimonio. No han sido pocas las declaraciones en las que Diego ha despreciado públicamente a su hermanastra.

Esta situación se habría visto agravada con la asistencia de Kiko a la boda de Diego en julio con Estela Grande.

Según Lecturas, Makoke ha sido quien habría decidido dar un paso adelante y poner fin a su relación con Kiko, quien al parecer ya no vive en la casa familiar. Matamoros abandonó el hogar a mediados de este mes de agosto, coincidiendo con el 20.º aniversario de su romance.

La noticia ya habría sido recibida por el entorno de Kiko Matamoros, así como el de sus hijas, Ana y Laura, y el hijo de Makoke, Javier Tudela. Este es un duro golpe para Ana, quien además acaba de cumplir la mayoría de edad.

La ruptura de una de las parejas más estables de la prensa rosa se suma a los duros golpes que en los últimos meses ha recibido Kiko: Hacienda publicaba su nombre en su listado de morosos por deberle al fisco un millón de euros. Como consecuencia, Matamoros ha puesto a la venta su casa en la urbanización de La Finca, valorada en dos millones de euros.