Resaltó que es "un centro científico con vocación de excelencia" y que "los grandes centros científicos no necesitan ser mastodontes urbanísticos". "El que sea un gran centro científico no depende del tamaño de sus ladrillos sino de la capacidad de sus cerebros y de la importancia de su actividad", subrayó refiriéndose también a que se haya ubicado en una ciudad pequeña como Soria.

El centro que depende del Instituto de Nacional de Investigación Nacional y Tecnología Agraria y Alimentaria (INIA) está ubicado en el campus de los Pajaritos y cuenta con una superficie útil de unos 1.300 metros cuadrados en el que se han invertido 1.900.000 euros.

El director general del INIA, Javier Martínez Vassallo, recordó que el centro está integrado en el PAES y es "un tren de largo recorrido". La idea nació en el 99, se adjudicó la construcción en el 2005 y en noviembre del 2007 finalizaron las obras del edificio.

Reconoció que fue difícil la identificación del centro, sin embargo, señaló que el INIA tenía claro que "el centro debería ser de interés socioeconómico para Soria" y "se dedicara a un tema que tuviera cierto carácter de nicho de investigación que le pudiera dar capacidad competitiva, aunque el centro fuera pequeño y que no reprodujeran, en la medida de los posible, investigaciones ya accesibles".

En este sentido, Martínez Vasallo insistió que el centro abre sus puertas "con el propósito de que sus actuaciones estén enfocadas al ámbito nacional" y no renuncie tampoco al ámbito internacional. Sin embargo, por su enclave geográfico, dijo induce a prestar una especial atención a la problemática del entorno, refiriéndose al sector agroalimentario.

Entre las líneas de investigación, señaló la de "bioquímica y microbiología de componentes alimentarios" o la de "nutrigenómica y alimentos funcionales", que pueden ofrecer una "originalidad competitiva en la sociedad del conocimiento". Esta última estudiará cómo los componentes alimentarios afectan a la salud de grupos de población o individuos concretos. Alfredo Martínez, procedente de la Universidad de Navarra, será quien dirija la investigación junto a ocho especialistas. "Es gente buena, es gente de prestigió", destacó Martínez Vassallo.

La tercera línea investigará el ámbito de los cultivos alternativos y los bioproductos.

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