La tradicional 'cantada d'havaneres' reúne cada año a más de 30.000 personas en el núcleo de Calella de Palafrugell (Baix Empordà). Para minimizar los problemas de movilidad y para garantizar la seguridad del acontecimiento, la Policía Local ya hace una semana que trabaja para que todo esté a punto este sábado al atardecer. Su jefe, el inspector David Puertas, ha explicado que es un dispositivo "complejo" por la gran afluencia de público, la orografía de la zona y porque el acontecimiento alcanza tanto el ámbito terrestre como el marítimo.

"Nuestra principal preocupación es causar las mínimas molestias y tener la máxima seguridad", ha detallado. En el dispositivo trabajan más de 80 efectivos, entre la misma Policía Local, los Mossos d'Esquadra, la Guardia Civil y los Bomberos. Además, también cuentan con el apoyo del Club Vela Calella para ayudar a "ordenar" la llegada de las embarcaciones que siguen el concierto desde el mar.

La 'cantada d'havaneres' de Calella de Palafrugell es una de las grandes citas del verano en la Costa Brava. El centro neurálgico y el alma de la 'cantada' es la playa de Port-Bo, donde los grupos participantes suben a un gran escenario y llenan la noche con los cantos de taberna que recuerdan viejas historias marineras. Este año, se lleva a cabo la 52 edición y todas las entradas anticipadas ya están agotadas.

Detrás de la velada musical, se ha desplegado un dispositivo en el cual participan de forma coordinada más de 80 efectivos de la Policía Local de Palafrugell, de los Mossos d'Esquadra, de la Guardia Civil y de los Bomberos. El objetivo, según ha expuesto Puertas, es doble: por un lado minimizar los problemas de movilidad y, por el otro, asegurar que el acontecimiento discurra con la máxima seguridad.

En las dependencias de la Policía Local, responsables de los diferentes cuerpos de emergencias han realizado la última gran reunión para ultimar todos los detalles. "Es un dispositivo complejo porque Calella es un núcleo que tiene las dimensiones que tiene y reúne a más de 30.000 personas en un solo día, y esto teniendo en cuenta que también hay vecinos", ha concretado el inspector.

De hecho, precisa que ya hace una semana que trabajan para preparar el dispositivo. Una vez fijadas las responsabilidades de cada uno y establecidas las prioridades, este sábado será el momento de perimetrar la zona. Puertas recuerda que se mantiene el nivel 4 de alerta terrorista y, por eso, los cuerpos policiales "impermeabilizarán" el núcleo de Calella estableciendo diferentes círculos de seguridad. Así, habrá vehículos policiales, vallas y agentes vallando el acceso motorizado pero, a la vez, ha fijado una vía rápida exclusiva para los servicios de emergencias. "Se trata de que si hay cualquier emergencia, haya una salida ágil y segura", ha dicho.

Una de las peculiaridades de este dispositivo es que no sólo afecta al ámbito terrestre, sino también al marítimo. Decenas de embarcaciones año tras año llegan a la playa para seguir las habaneras desde el mar. "Hemos coordinado con la Guardia Civil, los Mossos d'Esquadra y los Bomberos y hemos establecido dónde estará situado cada uno y cuáles son los puntos de evacuación en caso de que sea necesario", ha explicado el jefe de la Policía Local, que añade que todas las boyas están llenas y que también cuentan con la ayuda del Club Vela de Calella para organizar las embarcaciones que se acercan a Calella para disfrutar del espectáculo.

Además de la seguridad, el dispositivo también pone el foco en la movilidad. Para reducir el número de vehículos que llegan a Calella, han situado un gran aparcamiento en la entrada de Palafrugell, desde donde sale un bus lanzadera que lleva al público hasta la zona de la 'cantada d'havaneres'. "Se trata de realizar todas las acciones posibles para que todo el mundo que venga pueda disfrutar y no tenga ningún tipo de problema", ha concluido el inspector Puertas.